El cashback consiste en que el afiliado reparte sus ingresos con los usuarios que compran un producto, es decir, devuelven un porcentaje prefijado a sus usuarios por cada compra online.
La comisión que estos ofrecen las reparten total o parcialmente con los compradores de esa tienda. Normalmente las personas que realizan estas compras tienen la opción de comprar directamente en la tienda online o a través de cashback y, de esta forma, ahorran con sus compras.
El cashback es una parte de la afiliación, es decir, los anunciantes de tiendas online establecen acuerdos comerciales con ‘publishers’ llamados afiliados. Al final, estos “publishers” son “comerciales” que atraen clientes potenciales a sus tiendas y todos salen ganando.
El marketing de afiliación siempre está orientado a la generación de resultados. El anunciante sólo paga cuando el usuario actúa y, por tanto, casi toda la responsabilidad recae en la figura del afiliado, quien promociona el ecommerce del anunciante.